Comunicación Intercultural

La comunicación, desde una perspectiva tradicional, se asocia a la difusión devertical de la información, es decir, desde la fuente hacia el público, buscando incidir en el comportamiento de las personas.  Sin embargo bajo un escenario de diversidad cultural, se encuentran múltiples expresiones mediante las cuales los grupos sociales pretenden visibilizar, construir espacios y dar a conocer las prácticas cotidianas.  En este sentido, se busca  promover el intercambio y el diálogo, con el fin de propiciar sentidos comunes.

La comunicación intercultural se plantea como un proceso y una experiencia en la que nos encontramos con los otros y nos transformamos mutuamente, a partir de la puesta en juego de intereses, expectativas y visiones de quienes participan en el encuentro, pero también a partir de aquello que nos une, vincula, y permite pensarnos y construir nuestro lugar en el mundo, bajo los lineamientos de una serie de principios comunicativos, como son: el reconocimiento mutuo, escuchar al otro, la co-responsabilidad, reciprocidad, equidad y afecto.

La comunicación intercultural se convierte en un elemento esencial para todo tipo de dinámicas sociales, especialmente las enmarcadas dentro de la innovación social, en la medida que describe e involucra estos procesos permanentes de “construcción y deconstrucción” de realidades entre actores.  Esta apuesta surge desde la diferencia, los conflictos, las negociaciones entre sujetos, donde la comunicación intercultural es entendida más como el interrelacionamiento, que la información, y da la posibilidad a las personas de compartir sus saberes y acciones, con el fin de encontrar significados comunes  para darle sentido a la vida,  las prácticas y  las representaciones simbólicas de los sujetos  que viven en contextos inmersos en la diferencia.

La comunicación se torna en un elemento estratégico para el trabajo compartido en las organizaciones y para generar procesos de asociatividad, cuando no pierde de vista que el proceso de interrelacionamiento, de conexión, de vinculo, se realiza entre seres humanos, es decir, personas y organizaciones complejas, con diversos intereses y expectativas, con cargas históricas y socio culturales distintas que es preciso tener en cuenta en los procesos de transacción, negociación y/o construcción de consensos y en el manejo de los disensos.